Hoy cumplimos un año de haber migrado, un año en Canadá que supone un cambio radical de nuestro plan migratorio original hacia Australia.
Al final, lo que importa son los resultados, y ellos nos dan siempre la razón cuando intentamos hacer un balance entre lo ganado y lo perdido.
Principalmente se extraña mucho a la familia y a los amigos que dejamos en nuestro país. También se extrañan las comidas que compartíamos y disfrutábamos regularmente (en especial el ceviche, jaja); se extrañan los lugares cotidianos y hasta los aromas y colores de los mercados y sitios a los que concurríamos con cierta asiduidad. Migrar no es fácil, eso ya lo sabíamos, pero no se siente tan duro hasta que no se está lejos, hasta que el sueño se convierte en realidad.
Por otro lado, hay muchas cosas que valen la pena: la seguridad laboral, la seguridad ciudadana, la educación, la cultura, el deporte, los servicios de salud, de transporte público, la felicidad de ver a tu familia crecer en un ambiente propicio para desarrollar cualquier tipo de habilidad o facultad física/intelectual que se posea.
Después de un año podemos decir estamos contentos y satisfechos y que seguimos adelante.
SalU2!
2 comentarios:
Hola Alejandro, Estaba bien alejado de los Blogs, pero estoy de Vuelta, que bueno saber que estan bien aunque pasando algo de frio, Seguimos en contacto.
Feliz Navidad!!!
Que bueno Pelos que todo este bien por allá. Aquí en Guate le aseguro que también se les extraña pero los que les tenemos cariño sabemos que están bien y eso nos pone contentos.
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